Columnista invitado: Dr. Dardo López-Dolz Madueño.
Resulta incomprensible que el partido político más fogueado, muestre, a mitad de gobierno, prematura pérdida visual y auditiva, junto con ausencia de atención al análisis oportuno y pasmosa lentitud de reacción.
El cálculo de plazos, riesgos, costos y eventual cosechas políticas de cualquier iniciativa de solución de los problemas nacionales, pasada la primera mitad, no justifica posponer hasta la inacción acciones políticas obligatorias al ejercicio del poder democrático, hacerlo pinta la democracia como forma enclenque, abriendo paso a nocivas nostalgias dictatoriales.
El cálculo de plazos, riesgos, costos y eventual cosechas políticas de cualquier iniciativa de solución de los problemas nacionales, pasada la primera mitad, no justifica posponer hasta la inacción acciones políticas obligatorias al ejercicio del poder democrático, hacerlo pinta la democracia como forma enclenque, abriendo paso a nocivas nostalgias dictatoriales.
La creación de una nación Pan amazónica como objetivo y las medidas de fuerza, fueron anunciadas públicamente hace un mes por AIDESEP en su congreso en el Hotel Meliá, estaba claro para donde iba el asunto, es inaceptable la sorpresa del gobierno.
La consulta previa a los habitantes de la selva, no puede ser entendida en democracia, como capacidad de veto. Era y es responsabilidad del Gobierno que esto quedara claro, en lugar de dejar cancha libre para que organizaciones plenamente identificadas, engañen a los nativos, azuzándolos para pretender antidemocráticamente que el 1.4% de la población Nacional tiene derecho excluyente de decisión sobre mas de un tercio del territorio nacional.
La ausencia de trabajo político oportuno del gobierno seguido de la débil amenaza jurídica, solo ha logrado un retiro de palabras con continuidad en los hechos delictivos, permitiendo a una agrupación con escasísimo peso especifico fijar agenda mediante una iniciativa abiertamente racista que con total impunidad, envalentonada por la dubitativa acción estatal, no vacila en delinquir. Bloqueos y tomas nada tienen de pacifico, son en si delitos violentos, independientemente de la justicia o injusticia de un reclamo, por tanto susceptibles en democracia de obligatoria sanción, aunque desde la expectativa política de su democrática robustez, la Defensoria eluda sistemáticamente afirmarlo. Nadie debiera poder atropellar impunemente el derecho ciudadano. Blandir sus armas, por ancestrales que sean, agrava el delito.
Tras la inacción, se acude hoy, desde desinformada posición capitalina, a la amenaza de legítimo ejercicio represivo de unas FFAA que en esa región esta hoy integrada mayoritariamente precisamente por nativos. Ojala no sea necesario ponerla a prueba.
Democracia es representatividad de las mayorías, depende en su origen de los votos, luego una administración honesta y eficiente requiere difusión oportuna de obras tangibles y el uso correcto de herramientas legitimas para mantener el orden, inteligencia analítica, anticipación política y absoluta firmeza en la represión del delito en cualquiera de sus formas. No usar esas herramientas es negligente, el precio de no entenderlo a tiempo es el caos y dictadura.
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